26 febrero 2018

Amores prohibidos



¿Existen los amores prohibidos? ¿Quién determina que un amor lo sea? 
¿Es la misma pareja la que cede a la presión social, de lo que "debe ser correcto" o "apropiado"? ¿Y, quién es el que debe poner el límite de lo "apropiado", la sociedad, la familia, los amigos? ¿Depende de la sociedad en la que uno se desenvuelva?
¿Si el lobo se enamora de caperucita y es correspondido, es un amor prohibido?


7 comentarios:

Anónimo dijo...

Felices los cuatro, no vale. Felices los dos, si vale y pa' delante

Noreyka dijo...

Los amores prohibidos no siempre están relacionados con "los cuatro" , a veces se prohíben por cuestiones de edad, raza, creencias y cosas raras que cree la gente
;)

Magda dijo...

Lo prohibido lo define la pareja,
si la caperucita a pesar de que el lobo sea de otra especie lo acepta, nadie se lo puede prohibir
Felices los 2!!

Anónimo dijo...

“Sentencia del caso de Caperucita Roja y el Lobo desde la perspectiva de la Corte Suprema de Justicia”:

Visto y considerando los acontecimientos ocurridos y por todos conocidos y considerando :

1. Que Caperucita no desconocía que podría encontrarse con el Lobo.

2. Que tampoco era ajena al hambre del Lobo ni a los peligros del bosque.

3. Que si le hubiera ofrecido la cesta de la merienda para que el Lobo calmara su hambre no habrían ocurrido los sucesos referidos.

4. Que el Lobo no ataca a Caperucita de inmediato y hay evidencias claras de que primero conversa con ella.

5. Que es Caperucita quien voluntariamente le da pistas al Lobo y le indica el camino a la casa de la Abuela, lo cual la convierte en cómplice.

6. Que, cuando Caperucita llega y el Lobo está en la cama con la ropa de la Abuela, Caperucita no se alarma.

7. Que el hecho de que Caperucita confunda al Lobo con la Abuela demuestra lo poco que iba a visitarla, hecho que se tipificaría como abandono de persona anciana por parte de la joven Caperucita.

8. Que el Lobo con respuestas simples y directas quiere, desesperadamente, alertar a Caperucita sobre su posible conducta final.

9. Que luego de que el Lobo hizo todo lo posible por alertar a Caperucita sobre de lo que sería capaz y ésta no entendió o no quiso entender, al Lobo no le quedó más remedio que actuar conforme a su inclinación natural y a su instinto animal exacerbado por la conducta de Caperucita.

10. Que es muy posible que antes Caperucita hiciera el amor con el Lobo e, incluso, lo disfrutara!!!

11. Que cada vez cobra más fuerza la versión de que cuando el Lobo le preguntó a Caperucita: ¿A dónde vas?, ésta le respondió: “A bañarme desnuda en el río”.

12. Que se desprende del punto anterior que es Caperucita la que provoca los más bajos instintos depredadores y concupiscentes en la pobre fiera.

13. Que merece un párrafo aparte la madre de Caperucita, en quien se aprecia irresponsabilidad y culpabilidad por no acompañar a su hija conociendo los peligros del bosque.

Por todo lo antes dicho, se absuelve al señor Lobo y se dispone además:

1. Notificar a la familia de Caperucita, recomendando a la Abuela que se integre a la sociedad, obligándola a vivir lo más cerca del centro de la ciudad y no en lo más profundo del bosque.

2. A la madre, apercibirla para que cumpla correctamente con sus deberes de madre. Estará en observación psiquiátrica durante 90 días para su valoración.

3. Se advierte a la Caperucita: A) hacer trabajo comunitario en la jaula de los lobos del zoológico local para que conozca plenamente la naturaleza y el instinto animal. B)Tendrá que indemnizar al Lobo con 150 soles diarios durante un año, así como prepararle todas las tardes su merienda, también darle masaje y hacerle pedicure durante el mismo lapso. C) Todos los costos inherentes a este proceso correrán bajo el peculio de la Caperucita, a quien en lo sucesivo solo se le dirá Caperuza.

Asimismo se aclara en el presente fallo que este proceso no afecta el buen nombre ni la reputación ni el honor del respetable señor Lobo. Publíquese, archívese y téngase por firme el presente fallo.

Atentamente;

Honorable Corte Suprema de Justicia de Ayacucho - Perú

Anónimo dijo...

Pobre lobito, cayó en la uñas de la caperusa.

Lia dijo...

Genero, clase social/economica , raza credo, religion y demas son prejuicios, pan de cada dia que tiene el hombre y lo que hace mal juzgada una relacion social o sentimental. Sin embargo, hay otras que nos relatan diversos libros que realmente crean enorme controversia como en la biblia, la mitología griega (como el origen del minotauro) y ahora hasta en los noticieros...esos amores aberrantes que incluso la psicología ha nombrado a algunas enfermedades con nombres de personajes de dichas historias. ejemplo: el complejo de edipo, complejo de electra, de Agripina...unos le dicen amores prohibidos, yo lo llamaría alteraciones mentales. Controversial.
interesante post
Lia

Anónimo dijo...

El amor es de dos. No hay juez que determine que es y que no es. Sólo esas dos almas saben realmente si son amadas y si son correspondidas. Si realmente hay amor y fidelidad, su fuerza vencerá, no habrá distancias. ni nadie quien lo impida, ni los separe. Salvo que el enemigo no esté afuera, sino dentro. Felicitaciones al lobito y su amada.